La poesía se hace materia cuando el movimiento editorial, grupos aficionados, asociaciones culturales y talleres de creación literaria alimentan pequeños circuitos literarios en el barrio, la ciudad, las provincias, las regiones. Eventos como el Festival de Poesía de Lima existen a la sombra de los ministerios y gracias a la gestión de organizaciones civiles que apuestan por hacer / crear ciudadanía a través del arte.
Segundo festival de poesía de Lima
Librería Perú conversó con los gestores culturales de la Asociación Cultural Casa Katatay. Ellos han iniciado un proyecto editorial y una utopía de palabras mayúsculas; conseguir que con altos y bajos empieze una tradición de peregrinaje poético desde sudamérica y del interior del país hacia Lima. Quizá diste un poco de ser el centro poético del mundo, como advierten en su página web, pero en definitiva es un emprendimiento notable.
Aves que viajan
Del interior del Perú llegaron Boris Espezúa (Puno), reciente Premio Copé de Oro, de Poesía 2009; David Novoa (Trujillo); Matilde Granados (Chiclayo); Martín Zúñiga (Cusco); Albert Estrella (Cerro de Pasco); Julio Paredes Vásquez (San Martín); Jimmy Marroquín (Arequipa); Navale Quiroz (Ica); Mario Morquencho (Piura); Nora Alarcón (Ayacucho); y Erick Sarmiento (Cañete).
Desde sus rutinas limeñas se sumaron al festival Rodolfo Hinostroza, Jorge Pimentel, Omar Aramayo, Enrique Verástegui, José Ruiz Rosas, Enrique Sánchez Hernani, Marco Martos, Hildebrando Pérez, Carlos López Degregori, Luis La Hoz, Alejandro Susti, Marita Troiano, Mary Soto, Sonia Luz Carrillo, Raúl Heraud, Tulio Mora, Rosina Valcárcel, José Luis Ayala, Domingo de Ramos, Armando Arteaga, José Pancorvo, Tatiana Berger, Victoria Guerrero, Manuel Liendo, Miguel Ildefonso, May Rivas, Jerónimo Pimentel, José Carlos Yrigoyen, Violeta Barrientos, Diego Otero, Rodolfo Ybarra, Willy Gómez Migliaro, Luisa Fernanda Lindo, Ana Carolina Quiñonez, Melissa Ghezzi, entre otros.
Cruzaron las fronteras de sus propios libros y atravesaron países hermanos para llegar al festival el poeta uruguayo Roberto Echavarren, el Ceilanés-Estadounidense Indran Amirthanayagam, quien acaba de publicar parte de su obra en Lima; Elisa Andrade Buzzo (Brasil); Santiago Vizcaino (Ecuador); Javiera Pérez Salerno (Argentina); Norys Odalia (Venezuela); Raquel Lanseros (España), René Higuera (México); Víctor Vimos (Ecuador); Javier Lara Santos (Ecuador); Sofía Lino (Argentina).
Únicos en su especie, evocaron a la poesía desde el cuerpo, sus imágenes y sonidos sendos exponentes como José Aburto; David Novoa y su mística; El Atelier de la carne, Diana Collazos, Sheila Alvarado y Cecilia Podestá; Mishap y su poesía Graffiti; Efraín Agüero Solórzano, John Martínez, Jair Uzziel y la bailarina Morella Petrozzi.
EL rito no estaría completo sin evocar el ánima de José María Arguedas, en su centenario. Tuvieron a su cargo las «Poéticas Visuales de Todas las Sangres «, que podrían definirse como ensayos visuales del poemario Katatay de la propio personaje de José María Arguedas: Laura Batticani; Diego Fernández Stoll; Gabriela Flores; Karen Bernedo; Mauricio Delgado Castillo.
Cuando los poetas se quedan sin palabras, los músicos tocan. Y viceversa. La música estuvo a cargo de Piero Bustos, El Comité Poco Flo, Cocaína, DJ Santos Chilcano, Sikuris, Etrum, Porno Star, Wasq´a, Linda Flores y Arpistas; y desde Argentina a Tony Fluye.
En suma, más de 70 poetas, críticos, artistas y editores de diversas partes del Perú y del extranjero invadieron Lima para hacer del arte un espacio de encuentro en las plazas, bares, museos y estaciones de bus. Una vez más y en dimensiones impensables la poesía se ha hecho materia a través de los recitales, conversatorios, exposiciones de poesía visual y vídeo poesía, acciones de perforpoesía, ferias itinerantes de libros y conciertos en el marco de esta fiesta. Mientras más grande sea la utopía imaginada, más se avanza.
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